El velocista cansado

No está. Lo peor es que tampoco se le espera. Camina por el campo como alma en pena, apático, jugando los "minutos de la basura". Balones a los que antes llegaba, ahora son una quimera. Desmarques que se traducían en goles, ahora son simples pérdidas de tiempo. La pregunta es: ¿Qué te pasa Fernando? Todavía recordamos ese 29 de Junio de 2008 como si fuera ayer, esa rapidez felina que te permitió marcar uno de los goles más importantes en la historia de España. Tus temporadas en el liverpool fueron memorables, haciendo de Anfield un verdadero templo para tus goles. Pero... ¿Cuando desapareció ese delantero voraz, codiciado por los grandes del viejo continente? En la temporada 2010 comenzó tu calvario. La temporada en el Liverpool no empezó demasiado bien, nueve goles en veintitrés partidos no son cifras de delantero estrella. Además, la figura de Roy hodgson en el banquillo nunca ayudó a que volvieras a tu mejor nivel. Por ello, en tu afán de seguir mejorando y no estancarte en un equipo como el Liverpool, sin grandes aspiraciones a corto plazo, tomaste la peor decisión de tu carrera. Confieso que yo pensaba que triunfarías en Londres, pensaba que Abramovich crearía un equipo preparado para ganar la Champions. Sin embargo todo fue de mal en peor. En los catorce partidos que jugaste tras tu fichaje como "blue" únicamente anotaste un gol, y lo que es peor, no te sentiste importante en ningún momento. Tras acabar la temporada, Abramovich tiró de billetera y contrató a Villas Boas, uno de los entrenadores con mayor futuro en el panorama futbolístico. Parecía que por fin tendrías la ocasión de demostrar tu valía en el Chelsea, pero los fichajes realizados por el magnate ruso no fueron en ningún caso de "campanillas". Únicamente Juan Mata podría entender mediante sus pases tu magnífico juego al espacio. Comenzaste la temporada como titular, he incluso firmaste frente al Bayern Leverkusen tu mejor partido como "blue", a pesar de no ver porteria. Aún así, poco a poco has ido perdiendo la confianza de tu entrenador en favor de Drogba y Sturridge, y has quedado relegado a un papel testimonial al que no estás acostumbrado. Queremos volver a ver a ese jugador que era el capitán del equipo de sus sueños, ese delantero que hizo vibrar a Anfield con sus goles. Por desgracia, seguramente no volverá. A pesar de todo, yo siempre te recordaré como ese niño que me hizo soñar y creer en que España podía ganar títulos. Muchas gracias y buena suerte Fernando.